En Gracias por fumar, Aaron Eckhart interpreta a Nick Naylor, un lobbista atractivo y carismático que trabaja para las empresas tabacaleras. Su tarea es aparecer en cuanto programa de TV haya sobre el tema del cigarrillo para persuadir al público de que fumar no es tan peligroso como afirman los grupos anti-tabaco. Él mismo está al tanto de que los cigarrillos matan, pero no le importa.
La película adopta un punto de vista bastante irónico al hablar tanto de las tabacaleras (representadas por El Capitán, un anciano “barón” del tabaco interpretado por Robert Duvall, que trata a Naylor casi como el hijo que nunca tuvo) como de los políticos y los grupos de presión que luchan contra el cigarrillo, personificados en el senador Finistirre (William H. Macy).
Las escenas más graciosas se dan entre Naylor, una lobbista que trabaja a favor de las empresas de bebidas alcohólicas (María Bello) y otro que lo hace a favor de las empresas fabricantes de armas de fuego. Se autodenominan “los Mercaderes de la Muerte”, y compiten sobre cuál de los productos que representan causa más bajas. Y las más interesantes, entre Naylor y su hijo (interpretado por Cameron Bright), que lo admira y que intenta imitar su labia.
Hay un detalle llamativo del film: si bien se habla constantemente de fumar, nadie lo hace en pantalla y ni siquiera se ven cigarrillos (aunque sí aparecen en las escenas borradas y en el final alternativo que se pueden ver en el DVD).´
Gracias por fumar es una de las películas más graciosas que he visto últimamente, y por eso la califico con un 9.
Las escenas más graciosas se dan entre Naylor, una lobbista que trabaja a favor de las empresas de bebidas alcohólicas (María Bello) y otro que lo hace a favor de las empresas fabricantes de armas de fuego. Se autodenominan “los Mercaderes de la Muerte”, y compiten sobre cuál de los productos que representan causa más bajas. Y las más interesantes, entre Naylor y su hijo (interpretado por Cameron Bright), que lo admira y que intenta imitar su labia.
Hay un detalle llamativo del film: si bien se habla constantemente de fumar, nadie lo hace en pantalla y ni siquiera se ven cigarrillos (aunque sí aparecen en las escenas borradas y en el final alternativo que se pueden ver en el DVD).´
Gracias por fumar es una de las películas más graciosas que he visto últimamente, y por eso la califico con un 9.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario